¡¡¡¡Nos vamos!!!! (Primer destino)

20-11-19


Llevábamos muchos días preparando las maletas...y preguntándonos ¿qué tiempo hará? Así que Amanda, que es a la que mejor se le dan los climas, fue la que nos dijo qué tiempo haría y que debíamos llevarnos. Aunque sea diciembre y aquí en España haga frío, allí, en nuestro destino hace mucho calor! Aunque también precipitaciones altísimas!
Amanda nos recomendó llevarnos ropa no muy abrigada, pero que no se nos olvidara el paraguas!!

Estábamos muy emocionadas al empezar nuestro viaje, tanto tanto que casi perdemos el avión por comprar M&M en un kiosko. Salimos desde Madrid, desde el aeropuerto de Barajas. Cogimos el vuelo de Madrid hacia Sydney a las 22:30h de la noche. Tuvimos que ir en clase turista, porque aunque parezca lo contrario, no somos millonarias ni nada por el estilo. (El vuelo costó 6199$). Fue un viaje laaargo, y aburrido, muy aburrido. De hecho, Candela se durmió y estuvo todo el viaje sin decir una palabra, lo que lo hizo más aburrido aun. Después de dos días de interminable vuelo, llegamos a nuestro destino a las 6:10h de la madrugada, con demasiadas ganas de estirar las piernas y una gran aventura por delante. Lo difícil, fue encontrar nuestro hotel. Nos alojamos en un hotel que tenía unas vistas impresionantes, nos encantó.

Puente de la bahía

Como el hotel se encuentra en pleno centro de la ciudad teníamos cerca todo lo que queríamos visitar. Ese mismo día, tras dejar las maletas, acomodarnos a nuestra habitación, y descansar algo de ese largo viaje, fuimos a ver el puente de la bahía, nos quedamos realmente impresionadas, era mucho más grande de lo que parecía en las fotos.
Nos contaron que la bahía que pasaba por debajo de ese puente, se encontraban dos de los símbolos más fotografiados de la ciudad. También nos contaron que la mayor fiesta de año nuevo del país se celebraba allí, en las orillas de esta, y que más de un millón de personas iban allí a ver un espectáculo de fuegos artificiales.
Fuimos a comer a un restaurante, nos dimos una sorpresa cuando vimos que en Australia se come cocodrilo, si, cocodrilo!! Aunque nos dio mucho asco cuando lo vimos...al final decidimos probarlo, todas menos Alba, que le daba mucho, MUCHO asco. Y no, no estaba tan malo.

Quisimos aprovechar la tarde y salirnos un poco de tanto alboroto, tantos coches, tantas tiendas...para ir a visitar las Montañas Azules.
Si creíamos que nos había sorprendido el puente, ahora nos habíamos quedado IMPACTADAS era maravilloso, eran unas montañas muy grandes y muy bonitas. Realmente mereció la pena visitarlas, aunque Fany tuviese miedo a las alturas al principio, tras un buen rato intentando convencerla lo conseguimos, conseguimos montarnos las cinco en el teleférico. Las vistas eran asombrosas!!

Para terminar el día bien, quisimos ir a un restaurante que nos habían recomendado unos amigos que fueron allí hace tiempo.
Era un restaurante muy elegante que estaba cerca de la bahía.Tenía muy buena comida, y los mejores chefs de la ciudad. Tenían muy buenos camareros y la decoración tanto del restaurante como de los platos era de admirar.
Después de un día tan agotador y cansado, aunque maravilloso y lleno de nuevas experiencias, nos vamos al hotel para descansar, que mañana nos espera un nuevo día!


Al día siguiente cuando nos levantamos, después de prepararnos y recoger las maletas para más tarde coger nuestro segundo pero no último vuelo, bajamos a desayunar al bar del hotel. Ponían desayunos deliciosos!

Esa mañana fuimos a ver las figuras de cera de Madame Tussauds. Nunca antes habíamos visto figuras de cera ninguna de nosotras, así que era algo nuevo. Era una sensación entre impacto y escalofríos, había algunas que daban mucho miedo!!

Cogíamos el vuelo a las 16:00, así que cuando salimos de allí fuimos a por las maletas y a por nuestras cosas del hotel, para coger el taxi que nos llevaría al aeropuerto. Y sin a penas darnos cuenta ya estábamos de nuevo en un avión... camino a nuestro siguiente destino!!


(Julia Ciudad)